CAPITULO 1: NO QUIERO SER HUMANA quien es tamahashi? I

los copos de nieve caian por el suelo, se desparramaban y en cuanto tocaban el suele se empezaban a derretir.El sonido taconeante de mis pasos recoriendo las calles, era ajeno a mi y a la poca gente que estava al rededor. La luz anaranjada brillaba en los cristales de mis gafas, y mi pelo mojado y lleno de nieve semiderretida aparentaba todovia mas sucio de loq ue estaba. L a musica retumbaba en mis oidos como una amarga melodia de oscuridad, y combertia cada acorde en una lagrima.Lo vi siempre tan claro todo, pero algunas veces la niebla, te acorrala, esta vez, era densa, rojizo oscuro, de una profundida grande, y desprendia un dulce olor a sueño.

Pocos pasos mas alante vi una figura, una figura bastante indecisa, no savia si era chico o chica, pero llevava un largo pelo liso, con unas bonitas mechas roja...me llamo la atencion, en esa pequeña ciudad sin importancia, habia pocas personas como yo, quiza un par de emos, dos pares de scenes, y unos 10 heavys o por el estilo, como mucho, claro que bien no era de extrañar, que en una ciudad oligonera como aquella solo hubiera canis y chonis, y adultos a los que le dabamos asco, y nos repelian.

Segun me acercaba fuy denotando claramente las formas de un chico, no era choni, slataba a la viste por lo que me alegre, tampoco era emo, era mucho mas firme, y levantaba un aura de seguiridad ferrea de la que ningun emo de la ciudad disponia, no precia scene, era mucho menos cantoso, se hacia marcar, claramente, a decir verdad, era casi mas alto que yo, vestia de negro, y el pelo le llegaba mas largo que a la mitad de la espalda

cuando llegue a su lado me di cuanta de que sus facciones no eran españolas, eso se notaba, su piel era hermosa y lisa, estaba mirando la nada, precia nostálgico, y se le notaba solo, pero aun así, una parte de el desprendía un aura de fuerza, de una frialdad absoluta.

me gusto, me gusto mucho, se podría decir que me hechizo, de repente me miro, sus ojos eren fríos tempanos de un tono dorado sobre natural, como los míos, pero en cambio no expresaban nada, su esteva nostálgico como me había parecido, simplemente no estaba, parecía no formar parte de esta época, ni de este lugar.

se puso el semáforo en verde, y me apresure a cruzar, el me paso con facilidad, y mire su hermosa forma de caminar, grácil y ligera. fui un par de minutos detrás de sus pasos, sin prisa, mirando como la nieve se derretía ante sus pasos, como su pelo danzaba con el aire como si fueran gráciles mariposas jugueteando con las hojas.

entonces el cruzo, y no lo volví a ver.

Llegue a mi casa, empapada, no había nadie aun en casa, me apresure a quitarme toda la ropa, y meterme en el baño, limpie bien mi pelo, y me relaje.